Abstract
Este artículo propone que en el análisis de una mujer realizado por una analista mujer se puede encontrar un núcleo melancólico en el interior de la situación transferencia-contratransferencia, que termina siendo la expresión de la pérdida del objeto materno primario cuyo duelo no ha sido elaborado. El apego al objeto primario perdido puede ser preservado de manera melancólica e invisible y el anhelo vinculado a este objeto podría llegar a alcanzar una representación únicamente como après coup2 del proceso analítico. Se exploran los vínculos entre este amor primario, la melancolía y lo irrepresentable en el análisis de mujeres. Se subraya que estos análisis evocan poderosamente la relación con lo somático. La internalización del cuerpo de la madre, requisito para el desarrollo psíquico de la mujer, puede adquirir cualidades atemorizantes y fragmentadas de objeto parcial. Se discute el ejemplo clínico de un análisis con una frecuencia de cinco sesiones a la semana.