ABSTRACT
Australian schools have positioned themselves as places where young people are able to develop cultural and social capital as well as develop their sense of belonging. By exploring Australia’s federal and state policies, this paper provides insight into the educational structures which shape migrant and refugee youths’ educational experiences. This paper draws from Bourdieu’s concepts of habitus, field and capital to theorize school belonging and interrogate the existing Australian literature to provide further insight into how Australian schools create spaces for newly arrived young people to belong. In particular, this review of literature explores how social actors within the field of education, such as school leaders, educators and peers, provide support and create inclusive environments for newly arrived migrant and refugee children in New Arrival Programmes and mainstream schools alike. This paper argues that schools, and teachers more specifically, must disrupt their current ways of thinking and doing to provide inclusive learning environments which build cultural and social capital and create a sense of belonging for newly arrived migrant and refugee youths.
RESUMEN
Las escuelas australianas se han posicionado como lugares donde los jóvenes pueden desarrollar su capital social y cultural y también un sentido de pertenencia. Mediante el análisis de las políticas federales y estatales australianas, este artículo revela las estructuras educativas que condicionan las experiencias de aprendizaje de los jóvenes refugiados y migrantes. El artículo se basa en los conceptos acuñados por Bourdieu, habitus, campo y capital para conceptualizar la pertenencia escolar e interrogar la literatura australiana existente sobre el modo en que las escuelas australia-nas crean espacios para fomentar la pertenencia de los jóvenes recién llegados. En particular, esta revisión de la literatura explora el apoyo prestado por los agentes sociales en el ámbito de la educación — líderes escolares, educadores y compañeros — para crear entornos inclusivos para los niños migrantes y refugiados, tanto en el marco de los programas para recién llegados (New Arrival Programmes) como en los centros escolares convencionales. Este artículo defiende que las escuelas y, en concreto, los profesores, tienen que ser disruptivos con sus modos de pensar y actuar para ofrecer un entorno de aprendizaje inclusivo que facilite la construcción de capital social y cultural y el desarrollo de un sentido de pertenencia de los jóvenes migrantes y refugiados recién llegados.
Disclosure statement / Conflicto de intereses
No potential conflict of interest was reported by the authors. / Los autores no han referido ningún potencial conflicto de interés en relación con este artículo.