Abstract
This article documents the critical friendship of an experienced teacher educator and a doctoral student through our joint exploration of student teaching supervision. By adopting a co/autoethnographic approach, we learned from biographical and contemporaneous critical incidents that informed short- and long-term practices. In particular, we learned about supervision from our experiences as student teachers, mentors, and university supervisors. We learned about supervision through experiences and insights as they occurred and from the relational dynamics provided by our critical friendship. We dissect critical moments that resulted in a series of key understandings. Autobiography informs practice: in sharing our biographies, we developed an understanding and vision for the type of supervision practice we wished to enact. Reflection and discussion inform practice: by journaling and discussing the supervision process, we reconsidered and acted upon practice. Finally, critical friends provide transformative insights into practice: we learned from each other through interaction and critique of past actions, current practices and future actions. Our collaboration was instrumental in providing a vision that defined our individual pedagogies of supervision. Consistent with other scholarship on the learning of student teacher supervision, this article promotes the provision of a support space for both novice and experienced supervisors to deconstruct and improve practice.
Re-aprendiendo la supervisión de docentes en formación: un self-study co y autoetnográfico
Este artículo documenta la amistad crítica entre un formador de docentes experimentado y un estudiante doctoral en nuestra exploración de la supervisión de docentes en formación. Por medio de la utilización de una aproximación co/autoetnográfica, aprendimos de los incidentes biográficos actuales y que afectan prácticas de corto y largo plazo. En particular, aprendimos acerca de la supervisión a partir de nuestras propias experiencias como profesores en formación, mentores, y supervisores universitarios. Aprendimos también a partir de experiencias y comprensiones a medida que iban emergiendo y a partir de las dinámicas relacionales provistas por nuestra amistad crítica. Examinamos momentos críticos que dieron lugar a una serie de comprensiones clave. La autobiografía informa la práctica: al compartir nuestras biografías desarrollamos una comprensión y una visión del tipo de práctica de supervisión que queríamos desarrollar. La reflexión y la discusión informan la práctica: al llevar una bitácora y discutir el proceso de supervisión reconsideramos y tomamos decisiones sobre nuestra práctica. Finalmente, los amigos críticos proveen comprensiones transformativas sobre la práctica: aprendimos de cada uno por medio de la interacción y la crítica de acciones pasadas, prácticas actuales y futuras. Nuestra colaboración fue instrumental en la construcción de una visión que definieron nuestras pedagogías individuales sobre la supervisión. En consistencia con la literatura sobre la supervisión de profesores en formación, este artículo propone la creación de espacios de soporte tanto para los supervisores principiantes como para los experimentados para deconstruir y mejorar la práctica.